La
pollera larga pide ser reivindicada desde el fondo del guardarropa. Ya viene
haciendo el reclamo desde hace un par de temporadas mientras lucha por
deshacerse de la injusta fama de prenda “sólo apta para mujeres altas”.
La
falda larga ha vuelto con un estilo que admite looks sofisticados.
De
algodón en diseño versión sport chic, plisada en clave de tendencia 2015, de
gasa para las vintage y con mucho vuelo para las románticas, la prenda femenina
por excelencia ha regresado en distintas versiones para convertirse en una
pieza comodín del armario.
Confeccionadas
en géneros atemporales y con molderías sentadoras, las nuevas faldas largas se
adaptan a todas las estaciones del año y nos ofrecen un sinfín de combinaciones
que maximizan nuestras opciones.
¿Otra
buena noticia? Que la pollera larga estiliza y es apta para todas al margen de
la altura. Desmitifiquemos la creencia de que las petisas no pueden utilizarla,
sí pueden con ciertas precauciones: elegir géneros con mucha caída y poco
volumen. Las más altas pueden presumir con las que tienen mucho vuelo y telas
vaporosas y estampadas.
Eso
sí, dos advertencias clave:
-Evitemos
la pollera negra larga de algodón. Da un look demasiado religioso y resulta
difícil de combinar.
-Huyamos
despavoridas de la falda de algodón blanca: no sólo es transparente, sino que
se ve demasiado barata –como de playa- aunque nos haya salido una fortuna.
-Para las altas, mas volumen.
-Para las mas bajas, mas rectas y con caida.
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